En los coches de carreras los Ingenieros buscan rendimiento y eficiencia

L as carreras de coches son sinónimo de innovación, y los que compiten son capaces de hacer lo que sea para ganar una décima de segundo, aunque hagan un poco el ridículo por el camino andando en coches diseñados por personas fuera de lo común; pues los pilotos suelen decir que no les importa si los coches son feos siempre y cuando sean rápidos. En otras palabras, los coches de carreras no son tan atractivos por una decisión estética, sino porque tienen el diseño más eficiente para conseguir el mejor rendimiento. En general, cuando un ingeniero diseña un coche de carreras, tiene en cuenta dos aspectos, el primero es que la carga aerodinámica sea la mayor posible para que el coche vaya más rápido en las curvas, y que la resistencia aerodinámica, o “drag”, sea la menor posible para que el coche vaya más rápido en las rectas y básicamente estos dos aspectos suelen estar relacionados. Hay otras preocupaciones, por supuesto, como la seguridad del piloto, el espacio que ocupa el motor y los mecanismos internos, la necesidad de cumplir todas las reglas, etc., pero donde se ha visto más innovaciones a lo largo de los años es en el diseño aerodinámico.